Los miro, los miro, los observo, intento analizarlos. Pero no.
No soy yo.

Supuestamente soy yo, pero no me encuentro!
Cuanto mas me adentro en ellos, mas me pierdo en su inmensidad.

Pero ya dejan de ser los colores, la forma... es algo mas. Hay algo mas.

Me pierdo en ellos, mas los miro, Mas conciente soy de todo lo que no sé. De lo inmenso que hay...

Mas miedo me da, mirarlos, mirarme, y no encontrarme, mirarme y ver que NO soy YO.
Quien es, entonces la que me mira?, quien esa, que luce igual que yo? Acaso ESA es mi imagen?, ahora todo parece ser mentira. Ahora parece que el cuerpo, MI cuerpo es mentira.

Ando caminos, sensaciones, de pronto no existe el tTIEMPO ni el espacio, hay colores que no tiene nombre... nada tiene nombre allí... dentro de mis ojos.

“La lucha y la rebelión implican siempre cierta cantidad de esperanza, en tanto que la desesperación es siempre muda.”

Charles Baudelaire.

Blanco



Ella se divertía como una niña.
Sus ojos rebosaban de alegría.

Todo su cuerpo se contorsionaba al ritmo de alguna vieja canción
que resonaba en su cabeza.

Mientras cerrando los ojos gritaba “¡nieve, nieve!”.
Y esos pequeños copitos –los primeros que veía en su vida—se hacían agua al tocar sus manos estiradas hacia el cielo.
Agua que recorría las arrugas de su rostro como si fueran caminos.

(a mi abuela Elsa)

ANIMAL




Ya no es pensar...
Intuir,

----------Tener la certeza de que algo muy grande va a hacer sobre mi...
O mejor dicho: que otro yo, un yo mas grande, GIGANTE, va a caer sobre mi yo pequeño, sobre mi yo actual.
-----Un yo extremo, un yo pleno de vida, un yo puro de espíritu, un yo que no es calido, sino que QUEMA,
Un yo que no se eleva, vuela y es la TORMENTA,
Un yo que transforma lo que toca, dejando todo destruido a su paso, un YO que destruye para volver a CREAR.


Un yo APASIONADO,

Un yo VICERAL,

Saber la inminencia de su llegada, sentir su presencia acercarse, sentir ya su aliento que quema...

Me consume la ansiedad, me como las uñas de mis pies, me como mis pies, me trago a mi misma, me devoro entera de ansiedad... me arranco los pelos, tiro de ellos y nunca llego al final, son eternamente largos,
Nunca acaba de llegar...

Ansias...

Dolor
Me retuerzo en mi propio jugo,

Me cocino en el,

Hierve mi sangre mi piel se transforma, me salen escamas
Me arrastro por las paredes, las traspaso, llego al techo, y camino en el, dejo a mis pies allí arriba y bajo sin ellos, me despedazo y voy dejando restos míos por toda la habitación...

Nada funciona... la ansiedad no se va.

Ya esta demasiado cerca... y es demasiado grande para mi pequeño ser...
Muero de miedo y renazco a cada segundo.